Algunas tecnologías capturan naturalmente la imaginación. La industria automotriz de alta gama, las organizaciones benéficas sin fines de lucro, la exploración espacial: de maneras muy diferentes, todos estos sectores son dinámicos y emocionantes, y evocan los tipos de asociaciones e imágenes que los profesionales de marketing en industrias más comunes toman años para cultivar. La tecnología renovable es este tipo de sector. No es difícil hacer que la gente se entusiasme con el hidrógeno como una tecnología limpia y eficiente que puede hacer funcionar automóviles, autobuses, aviones, centrales eléctricas e incluso cohetes espaciales.

Bueno, eso es genial para nosotros, obviamente, y para todos los principales productores de tecnología de hidrógeno. Pero si bien tenemos el privilegio de trabajar junto a innovadores líderes que fabrican máquinas verdaderamente impresionantes, a veces vale la pena recordar las innovaciones más pequeñas, las que están aquí, ahora mismo, marcando una diferencia tangible en la forma en que vive la gente.

La energía portátil es el ejemplo perfecto. El objetivo es crear fuentes de energía más duraderas a través de procesos de fabricación que produzcan apenas una fracción de las emisiones de gases de efecto invernadero de las baterías de litio tradicionales. Los cartuchos de hidrógeno se pueden almacenar durante mucho más tiempo sin una disminución notable del rendimiento, son más seguros ya que el hidrógeno se puede almacenar en estado sólido dentro de la carcasa y se pueden recargar rápida y fácilmente.

¿Viajes de campamento con productos electrónicos de consumo? ¿Una carga adicional completa para teléfonos inteligentes y tabletas para viajeros de negocios acostumbrados a viajes largos sin acceso a la red eléctrica? ¿Estaciones de servicio para recargar cartuchos de hidrógeno que sólo requieren agua destilada para crear hidrógeno a través de la electrólisis? Bueno, toda esta tecnología ya existe, y cada año que pasa trae nuevos desarrollos: períodos más largos entre recargas, celdas más pequeñas que son más fáciles de almacenar, Hydropaks más potentes que pueden poner a trabajar dispositivos de productividad.

Un solo cartucho Hydrostik es capaz de proporcionar diez horas de energía con un consumo continuo de 1 W y se puede recargar hasta 100 veces. Junto con una estación de servicio de hidrógeno, los Hydrostiks son, por lo tanto, el equivalente a 1000 pilas AA desechables. Los Hydrostiks usados pueden cambiarse por cartuchos llenos o rellenarse usando una estación Hydrofill de Horizon, una estación de servicio bajo demanda que produce hidrógeno a partir de agua destilada.

Horizon ya trabaja con varias marcas líderes en energía portátil. Una asociación con Boc Industrial Gases dió como resultado Hymera DC, una unidad independiente que monitorea y recarga automáticamente las baterías. La Hymera se usa para cámaras de seguridad, cercas electrificadas y energía de respaldo para sistemas de IT Information technology y de comunicación. Horizon coopera con Air Liquide en una gama de productos de energía portátiles distribuidos como herramienta de promoción interna. Luego, el reactor de hidrógeno de Brunton se basa en el Minipak de Horizon para proporcionar un sistema de recarga portátil para varios dispositivos eléctricos, como teléfonos inteligentes, tabletas, dispositivos GPS, cámaras, reproductores de MP3 y linternas.

A veces son los pequeños cambios los que realmente impulsan un cambio en la conciencia. Cuando el hidrógeno se convierta en una alternativa viable para todas esas pequeñas actividades cotidianas, de repente esos automóviles, autobuses, aviones y cohetes parecerán el próximo paso natural en lugar de un futuro lejano.